El otoño ha llegado con su luz cálida y suave y sus cambios de temperatura locos, tan locos que en un mismo día y en un solo paseo, puedes encontrar a unos con camisa de pana y botines y a otros, en chanclas y a lo loco. Mi madre lo llama “el tiempo de los tontos” (no sin razón) y es que el frío-calor-frío es tan puñetero que nos deja tontos, tontos y enfermos!
Yo soy de las que además de pillarme un catarro de entretiempo, en cuanto sopla un poco el viento, me forro de capas y capas de ropa, de eso que te cuesta doblar el brazo jajaj …porque soy tan adorable y friolera!!
Desde hace algunos años, no tomo medicamentos. O al menos intento reducir su consumo al máximo. Y en esta época, mi fiel amiga es esta infusión de equinácea purpurea.
- Puntos a favor: El sabor es bueno por lo que no necesita azúcar, no amarga y el color tan atractivo como Ryan Gosling en Blue Valentine. (Si no la has visto, estás tardando)
- Puntos en contra: No han sido identificados.
Si has escuchado hablar sobre la equinácea pero aún no la has probado, deberías saber lo siguiente:
- Estimula la actividad global de las células responsables de la lucha contra todo tipo de infecciones.
- Tiene propiedades antimicrobianas; adiós bacterias, hongos y virus.
- Refuerza el sistema inmunológico.
- Es un antibiótico natural.
Se puede tomar de muchas maneras, en comprimidos, en cápsulas, en tinturas, en infusiones… Te animo a leer, investigar, probar y sacar tus propias conclusiones. Yo la compro en el herbolario del barrio y tomo 2-3 infusiones al día cuando estoy pachucha y en los cambios de estación basta con una.
Me ayuda ❤️ Me hace mejorar en mis catarros ❤️ Y compartir es de guapas
Espero que os animéis a probar.
Suena: Cold little heart (Michael Kiwanuka) ¡Me encanta esta canción!!!!